A tu lado
Desde el mismo instante en que te vi sentí
como un interminable cosquilleo de corriente continua recorría mi cuerpo
erizando todos los poros de mi piel; con ardimiento adolescente me
acerqué hasta ti y te pedí un baile. Tú, sorbiendo del vaso que contenía el
dulce San Francisco, sonreías con alegre picardía no exenta de cierta compasión
ante el atolondrado balbuceo de mis palabras. Pero dijiste si.
Y bailamos.
Fueron sólo tres minutos, el tiempo que dura una melódica
canción. Tres minutos mágicos en los que, ávidamente abrazados,
nuestros pies danzaban sobre el borde de un minúsculo azulejo; tú te dejabas
llevar con la cabeza posada en mi hombro y yo, con los ojos cerrados y el
corazón rutilante, degustaba golosamente aquellos segundos inmortales.
De pronto el tiempo pareció detenerse. La canción
seguía sonando, pero el espacio se fue transformando. Los cimbreantes
movimientos cesaron y me encontré caminando de tu mano por una vereda salpicada
de piedras y flores de azahar, marchábamos en dirección a una colina lejana y
desconocida. Pronto eras tú quien sujetaba mi brazo cuando el caminar se hizo
pesado; tú eras mi sostén y mi lazarillo, mi confianza y mi guía, mi ilusión y…
mi amor.
La canción sigue sonando.
Hoy, con la perspectiva que da el propio tiempo,
se que la vida ha sido justa conmigo; nos une un hogar, dos vidas y un sosegado
presente; atrás quedó el arduo pero cálido pasado; ahora únicamente aspiro a vivir un sencillo
futuro... a tu lado.
El baile aun no ha terminado.
Muchas más relaciones en casa de San ...Y nacimos casualmente
Así es José, con tu permiso me quedo en tu casa.
ResponderEliminarUn saludo y buen día
Ese baile que se inició es el que hemos de seguir bailando, bien es cierto que no con la misma intensidad que entonces, sino con maaaaaaaaaaaás...(aunque estemos algo tullidos y más viejos,¡jajajaja!)....porque se escapa el tiempo.
ResponderEliminar¡Ojalá nos dure mucho el baile y la coreografía que nos rodea!
Besos
Anna J.R.
Qué bonito baile!!! y que continúe vuestra danza muchíiiiiiiiisimo tiempo!
ResponderEliminarUn beso enorme, valenciano!
Esa danza que acompaña, el paso de tiempo y hoy es un recuerdo. Esa el símbolo de unión y que se ha vivido.
ResponderEliminarMuy lindo.
Un abrazo.
De aquellos bailoteos agarrados y juveniles, me acuerdo, y de aquellos instantes mágicos, una vida entera de relación maravillosa ¿qué más podemos pedir?
ResponderEliminarFelicitaciones por el relato y por lo que dice, besitos dos.
Leo mi comentario y ni yo lo entiendo. Perdón y vuelta:"La danza que acompaña en el paso del tiempo y hoy es un recuerdo. Es el símbolo de unión y garantía que se ha vivido"
ResponderEliminarAhora si.
Otro abrazo.
... y que no pare de sonar la música nuncaaaaaaa!!!!
ResponderEliminarBesos relacionados
Ojalá siga el baile mucho tiempo.
ResponderEliminarHola¡¡ ¿se puede? pues eso que he abierto el facebook despues de muchos dias y mira por donde te he visto con tu nuevo blog, asi que he decidido hacerte una visita en mi mitad de mis vacaciones, si aun me quedan unos dias de asueto, y no quiero poner los dientes largos a nadie, en fin que me ha gustado mucho el relato, y que la orquesta no deje de tocar...
ResponderEliminarsaludos.
Bonita historia de amor. La vida al lado de la persona amada, donde uno comprende al otro y le hace sentir bien. Primero todo empezó con un baile y de ahí siguió toda una vida juntos.
ResponderEliminarUn abrazo
Muy tiernas palabras, que alegría debe tener esa mujer al leer esto!
ResponderEliminarque continúe sonando esa melodía en vuestros corazones (como que me puse un poco cursi no?, jeje). Me encantó
Hola Jose Vte. no sabía yo de este nuevo blog, te visitaré con más calma, pero ese castillo de la portada me suena, ¿es el de Alhambra?
ResponderEliminarY en cuanto a tu relato, decirte que ojalá ese baile al lado de la persona a la que amas, dure mucho tiempo.
Un abrazo
Si Noche, es el castillo de Alhambra que está en la colina junto al pueblo. La foto la tomé hace un par de años que estuve por última vez allí.
EliminarEn este blog voy a colgar a partir de ahora los relatos que vaya escribiendo, el otro lo dejo para ocurrencias varias. Buenvenida y un abrazo
ooooooooooooooooh se me fue el comentario!
ResponderEliminarBué!...decía que el tiempo vuela y mirando hacia atrás la vida parece haber transcurrido en un abrir y cerrar de ojos!...pero claro, lo importante es saber que lo hemos vivido.
Un abrazo
Me has recordado cómo conocí a mi esposa, un baile en su facultad: ella tenía 17 años y yo 20. Bailamos y ese baile todavía continúa a día de hoy. Excelente!!!
ResponderEliminarUn abrazo
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ResponderEliminarUna historia de amor desde el punto de origen... las miradas! Cuando se flechan, nadie sabe a ciencia cierta qué pueda pasar, pero obviamente se ponen todas las energías y las ganas a que la relación perdure y el tiempo de a dos se convierta en atemporal. Creo que es lo que me transmites con tu relato, una eternidad danzando a la par el bals de la vida.
ResponderEliminarBesos: Gaby*
Perdón por el comentario anterior, jejeje! te hablaba como si recién te conociera, no me había dado cuenta que eras tú Vicente! Menudo despiste el mío!
Bueno Jose, estrenamos blog y te quedo muy bonito, felicidades, por eso y por tu relación, cuidaros mucho y seguir bailando, que la ilusión y la bella compañia no acaben nunca.besos querido amigo. para tu familia tambien.
ResponderEliminarUn relato lleno de ternura con un gran final. ¡Excelente! Me encantó visitarte. Un abrazo.
ResponderEliminaraquel baile perfectamente certero del verdaero amor, que no solamante une dos cuerpos en una dulce melodía en una hermosa canción sino que dos almas que aun sigen danzando al son del latir del corazón
ResponderEliminaraquel baile perfectamente certero del verdaero amor, que no solamante une dos cuerpos en una dulce melodía en una hermosa canción sino que dos almas que aun sigen danzando al son del latir del corazón
ResponderEliminarMuchos amores empezaron con un simple ¿bailas? el tuyo empezó, y lo mejor de todo, continua, y que sea así siempre. Me encantó leerte, hay mucha ternura en cada una de tus palabras. Un abrazo.
ResponderEliminarQué bello es el amor!!! y más cuando perdura y la vida de relación sigue como aquel primer baile. Lo de corriente continua te quedo del 10. Bienvenido a los jueves.
ResponderEliminarUn beso
Has tocado el tema de la pareja precisamente como yo lo veo, como un baile entre dos, acompasados, complices...
ResponderEliminarMuy bueno , de veras
Besos
Que paz trasmiten estas palabras Jose Vicente, la paz de unos dias que se viven dulces en la seguridad del amor compartido. Os felicito a los dos.
ResponderEliminarBellas tus palabras.
Un abrazo.
Ahhh no conocía este blog tuyo, me quedé un ratito admirando esa hermosa colina, casi que ya me había olvidado de que había venido a leer jajaja!
ResponderEliminarTócala de nuevo Sam! y que esa música suene para siempre en vuestros corazones. Que linda historia. Que buen final la aspiración de un futuro sencillo al lado de la persona elegida.
Me gustó mucho
Un abrazo
Muy bonito el relato. Desearles a los protagonistas que siga sonando la canción hasta el final de sus días.
ResponderEliminarSaludos!
Que no pare la mùsica y que la complicidad sea la bandera de esa uniòn. Magnìfico relato.
ResponderEliminarUn abrazo
fus
Continúa bailando al ritmo de aquella música única y inspiradora. El texto es muy hermoso... por supuesto, viene de ti :))
ResponderEliminarun abrazo :)
Llevas toda la razón, ´José Vte. nuestras respectivas historias han tenido el mismo elemento común. Un momento fugaz que nos ha llevado a la venturosa situación actual. Me ha encantado tu historia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y besos para Conchín.
José que hermoso texto, tan romántico y tierno. Un canto de amor y deseos cumplidos. Me transporté a todos los lugares que recorren tus palabras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Menos mal que se dedidió a bailar contigo, si no hubiera sido así, lo mismo tenías que haberla conquistado de otro modo, jeje. Lo importante es que la música sigue sonando como la banda sonora de una vida. Enhorabuena a los dos. Un beso para Conchin y otro para ti.
ResponderEliminarDeliciosa musica que para los relojes cuando en tres escasos minutos se forja toda una vida en comun.
ResponderEliminarUn beso
Afortunados ambos!!! :)
ResponderEliminar¿Has visto que horas y qué tardía ando con las visitas a los jueveros? Ainsssssss... El comienzo del cole es lo que tiene. Y con mucho gusto! (Mis peques están aún medio-eufóricos, jajajaja...)
Me quedo por tu casita, José Vte. ;)
Besos.
Te había leído pero no comentado, a veces os leo y comento más tarde, ya sabes cosas de tiempos y rutinas...
ResponderEliminarQué bonito es el amor cuando se siente!! recuerdo que eso pensé cuando lo leí... esos instantes quedan colgados en nuestros corazones para siempre, más si es tan grande que llega a ser toda una vida.
Besos