viernes, 27 de noviembre de 2015

Los jueves relato: Carta abierta a... Elisa

No sabía si hacerlo, pero al final me he decidido. La casualidad ha querido que justo una semana después de subir esta carta a la colina, H... (Perla Gris) ha convocado un jueves en el que nos pide una carta abierta. Por eso, y excepcionalmente, me he decidido a resubir esta carta que Pablo ha escrito a una niña salida de entre las brumas de unos sueños de escayola; a Elisa.  



Carta a Elisa
¡Querida Elisa!:
Hoy me acorde de ti. No, no creas que es algo tan extraño, me suele suceder en algunas ocasiones, como cuando perdido del mundo necesito acurrucarme junto a la calidez de algún recuerdo. Hoy ha sido uno de esos días. ¿Sabes? Encontré tu imperdible con forma de libélula, aquel que me regalaste cuando nos despedimos en el patio del sanatorio. ¡Qué alegría me llevé! Hacía tantos años que creía haberlo perdido. Contemplarlo fue como ver de nuevo tus ojos verdes clavados en mí, haciendo ligeros equilibrios sobre tu pierna mientras con la mano me decías adiós. Recuerdo aquel día y como sentí el corazón partido en dos; alborozado por mi regreso a casa pero triste porque tú te quedabas allí. 

Fue entonces cuando un loco impulso me llevó a escribirte esta carta. De pronto tuve la necesidad de hacerte saber que nunca pude olvidarme de ti, de tu sonrisa y tu timidez, de tus graciosas pecas marrones y de tus trenzas germinadas por el sol de la tarde; tampoco de la suavidad de aquel beso que me regalaste, el más limpio y dulce que jamás recibí. Como decirte que, a pesar de aquel año espinoso, del vacío y la soledad, de los castigos y de la añoranza que lastimaba, a pesar de todo eso, a veces desearía volver a tener diez años, regresar a nuestras tardes de verano, escuchar el arrullo cálido y entrañable del mar y sentarme a tu lado, bajo nuestro árbol junto a la casa del médico, envueltos de aquel candoroso amor infantil que ambos creíamos sentir.
 
Ahora, con la serena madurez que los años han deseado regalarme, rememoro aquellos días y la melancolía me estremece. ¡Cómo olvidar la amistad verdadera de unos amigos que nada tenían y todo lo daban! Tiempos de ilusiones convertidas en abrazos de humo y de trenes de esperanza que siempre corrieron más veloces que nuestras piernas. Pero Elisa, me gusta refugiarme en la acogedora ternura que brota de aquellos recuerdos porque en ellos siempre estás tú, como un manantial de cariños infinitos. Aunque a veces la nostalgia duela como astillas candentes clavadas en el alma. 

Querida Elisa, quisiera decirte tantas cosas. Expresarte mi deseo más profundo de que la vida por fin te haya tratado bien, que te haya devuelto algo de la felicidad que te robo en una infancia que nadie nunca mereció tener, rodeada de muros que no solo separaban, también olvidaban. Siempre pensé que los sueños solo eran versos grabados bajo el sol.
Es por eso, mi querida niña de alegre sonrisa y cabellos de azafrán, que evocando aquellos días mis ojos se humedecen en lágrimas, y te veo a ti y me veo a mí, juntos, ignorantes de un tiempo  que nos marcó, arropados bajo la sombra de los niños que fuimos, cuando me he decidido a escribirte esta carta…, aun sabiendo que jamás te llegará.

Pablo G.
Valencia, Octubre 201..

Gracias Perla

13 comentarios:

  1. Me ha parecido una carta tan tierna, tan pura y tan llena de nostalgia que me he estremecido al leerla.
    Un abrazo

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  2. Cuánta ternura! ...me encantó tu carta José, el recuerdo de esa hermosa y pura amistad ...un aporte maravilloso.

    Un beso.

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  3. Esta historia es el broche de oro de una lista de relatos sobre cartas dirigidas.a....Es tan hermosa que el que la lea no podría hacer mas que recordar ese amor primero en la inocencia...un amor que quizás no hizo nacer un beso...un amor que no tuvo tiempo de bailar pero que, en medio de esa vorágine de nuevos sentimientos comenzamos a sentir lo que seria el amor de verdad....un beso para ti y otro para Elisa donde se encuentre...

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  4. Preciosa carta a esa niña que fue el primer amor, como olvidarlo, y más en las circunstancias que se produjo.
    Un abrazo

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  5. En los amores del pasado se basan los del presente.
    Un abrazo.

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  6. Emotiva. Emocionante. Conmovedora. Así la sentí y así seguro se conservará mientras la recuerdes.
    Un fuerte abrazo.
    P.d
    espero tu foto para la tarjeta???

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  7. Ay José Vte. me he emocionado con esta carta tuya, se siente esa inocencia del primer amor, ese amor infantil que se mezclaba con los juegos y tardes bajo el sol... Ese arroparos el uno al otro en tan difícil situación, creo que Elisa se debió sentir muy cuidada, al igual que quien escribe esta carta se debió sentir muy cuidado por ella... Momentos eternos en tu memoria que nos regalas en forma de correspondencia... ojalá le llegara esta carta a Elisa...
    Muchas gracias a ti por participar, me ha gustado mucho leerte y que te decidieras a participar...
    Besines...

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  8. Que tiernas palabras para una amiga del pasado, pero que sigue hoy presente en el corazón.
    Sentida esta carta José Vicente.
    Besos.

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  9. Cuanta dulzura!, que delicada es tu carta a Elisa. Me has puesto la piel de gallina. que bien narrada, me has hecho revivir la historia. Un placer leerte amigo. cada dia mejoras.
    Un saludo.

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  10. Preciosa tu carta, una carta que me llega a lo mas profundo del alma. Elisa tu niña preciosa, niña luchadora, como tu, como muchos, niños con infancias que no merecimos tener....suerte que el amor lo puede todo y hace la vida mas facil. Dulce relato que da calidez, que hace estremecerse. Gracias por todo lo que transmites cuando escribes. Besos.

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  11. Preciosa tu carta, una carta que me llega a lo mas profundo del alma. Elisa tu niña preciosa, niña luchadora, como tu, como muchos, niños con infancias que no merecimos tener....suerte que el amor lo puede todo y hace la vida mas facil. Dulce relato que da calidez, que hace estremecerse. Gracias por todo lo que transmites cuando escribes. Besos.

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  12. ¡Cuánto sentimiento en estas letras! Desde la primera a la última.
    ¡Cuánto cariño, cómo se llena el alma al irlas leyendo!

    Me quedo con cada una de tus frases, hasta con las comas y los puntos, pero esta "Aunque a veces la nostalgia duela como astillas candentes clavadas en el alma", es preciosa como dolorosa.

    Un beso enorme y un gran abrazo.
    Un auténtico deleite perderme en las letras de tu carta y dejar que la libélula vuele.

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  13. Una carta preciosa, llena de ternura y de nostalgia por el primer amor, sobre todo sabiendo en las circunstancias que se produjo. Una pena que Elisa no llegue a leerla...
    Un beso y cuídate mucho!

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